"Nuestro destino de viaje nunca es un lugar, sino una nueva forma de ver las cosas.!

martes, 26 de marzo de 2024

Iglesia San Marcos, Orense, Buenos Aires


Un día nublado, frío y después de una noche de tormenta y lluvia, fue la escusa perfecta para pensar que no iba a ser un día de playa. Por eso decidí ir hasta la localidad de Orense que está a pocos kilómetros de Claromecó.

Me gustan estos días así, preparar algo para el desayuno, conocer una nueva localidad, y disfrutar de un almuerzo.

El día arrancó nublado, pero rápidamente comenzó a despejarse y con una temperatura sumamente agradable.







La Parroquia San Marcos, es un hermoso lugar con una connotación histórica especial para la comunidad local. La iglesia se destaca por su estado de conservación y su importancia para las personas de fe. Es un excelente sitio para conocer y un espacio para la reflexión espiritual. Es un punto de referencia para la comunidad local y un lugar de hermosa arquitectura e historia.







Las características arquitectónicas están marcadas por un estilo colonial que se caracteriza por mezclar elementos de las creencias españolas monoteístas, con algunos de la cultura indígena.

El interior es un “homenaje a la sobriedad”, con sus formas despojadas de ornamentos, sus sólidos muros blancos, sus baldosas coloradas tan típicamente coloniales, sus techos en pendiente con tirantes de madera a la vista, y bovedilla de ladrillo también pintada de blanco, que van delimitando los distintos espacios que la componen.
Destacándose los valiosos “vitreaux” de sus ventanas, muy bien conservados, y la belleza de su Altar Mayor. Las perfectas proporciones de los espacios de la Nave Central y las Naves Laterales hacen que al permanecer en ella el espíritu se reconforte.






Cabe destacar el campanario, que ofrece una fácil lectura desde el exterior, por las características de la torre, que alberga una campana con casi un metro de diámetro, fundida en Loiret de Francia. La buena calidad de los materiales utilizados hace que tenga un sonido muy particular y potente.






sábado, 23 de marzo de 2024

Toda la belleza de Dunamar, Claromecó, Buenos Aires




 Dunamar es un nuevo barrio residencial que se separa de Claromecó simplemente por un arroyo. Muy pronto fue ganando notoriedad por su variada vegetación, sus hermosas construcciones...

Basta con cruzar el arroyo para encontrarse con un lugar distinto, que lentamente comienza a tener sus códigos propios, hermanados con la naturaleza y la lentitud con la que corre el tiempo.







Por razones administrativas, no constituye un pueblo, ya que no posee código postal ni telediscado nacional. Sin embargo, es bastante diferente a la ciudad de Claromecó.

Se encuentra completamente arbolado, esta es una de las grandes diferencias. Por supuesto, son los miles de pájaros que merodean sus árboles los que le aportan un sonido y bullicio único a este marco de tanta belleza.

Durante la verano, cientos de turistas están comenzando a elegir este nuevo balneario para satisfacer sus necesidades de tranquilidad y paz en la costa atlántica.









La idea de este lugar surgió cuando Ernesto Friolín Gesell, hermano del fundador de Villa Gesell (Carlos Gesell) y propietario de los terrenos en los que hoy está Dunamar, decidió en conjunto con su esposa forestar estos médanos inhóspitos para poder luego construir algunas viviendas.

La empresa fue exitosa y rápidamente hubo inversores que se hicieron propietarios luego de que las tierras se lotearon.

Este hecho significó que Ernesto Friolín Gesell fuera uno de los habitantes más recordados de Dunamar. Es por esto que el puente que pasa sobre el arroyo que lo une con Claromecó y la principal avenida de Dunamar llevan su nombre.










En los últimos años, este pequeño reducto llamado Dunamar aumentó considerablemente tanto sus construcciones y visitantes estables como su oferta de servicios. Se instaló todo tipo de comercios.

Su parador, llamado Barlovento, es uno de esos lugares imperdibles de este pequeño balneario que lentamente comienza a tener vida propia y que logra día tras día estar en boca en aquellos que lo recomiendan. Dunamar, un lugar pegado a Claromecó que merece conocerse.





martes, 19 de marzo de 2024

Hermoso día de playa en Claromecó


Una buena opción en estas playas tan limpias, sin algas, es agarrar el auto e irte hacia el norte, donde hay muchas bajadas y no es necesario tener vehículos 4x4, lo único es estar atento a la marea, que no te sorprenda.







En lo personal me gustan mas estas playas apartadas, mas solitarias, se disfruta mejor de la naturaleza, de los sonidos del mar y las aves, aunque a veces los loros alteran esa tranquilidad.

Unos buenos mates, darte algunos baños y caminatas a la orilla del mar con mi cámara y captar esos momentos. Muchos van con la caña y disfrutan de un día de pesca.





Después de unas horas queda esperar el atardecer, el mejor momento de la tarde. recomiendo si vas a esta parte de la playa llevarte algo para comer ya que no hay los típicos vendedores ambulantes. como tampoco servicio de guardavidas.
Unas buenas facturas para el mate y ver caer el sol sobre el mar.